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Sandra Reyes

Marisa Caichiolo comparte su Lugar de enunciación




Elementos dispuestos para una transformación hacia simbolismos que permiten alzar la voz, pero también recurrir a los orígenes y la sanación, integran la muestra Lugar de enunciación, de Marisa Caichiolo.


La exhibición llega al MUSA Museo de las Artes de la Universidad de Guadalajara, bajo la curaduría del crítico y ensayista Andrés Isaac Santana, con un acercamiento hacia la faceta personal de quien también es generadora de proyectos artísticos a nivel internacional.


El rol femenino es protagonista en esta propuesta a través de la cual la autora establece una perspectiva propia acerca de la visualización de la mujer y de cómo ella es, a su vez, generadora de vida y un ser de gran fuerza que sortea dificultades pese a circunstancias desafortunadas.


“Es una especie de doble enunciación. Ser mujer y migrante también tiene mucho qué ver, desde dónde vengo, qué estoy haciendo en cada espacio en el que habito, temporalmente o no”, dice la artista.


La muestra se articula sobre tres ámbitos temáticos y de contenido, configurando así una suerte de tejido simbólico que actúa como metáfora del propio cuerpo de la creadora y de la experiencia cultural del mismo.


En qué más puedo servirle y Semilla sagrada son las experiencias más experimentales e inmersivas. En la primera, la invitación es a reflexionar sobre lo observado como cotidiano, pero que en lo profundo refleja una realidad de desigualdad. El cierre del recorrido enuncia la doble cualidad de la artista y curadora.


“En su totalidad, la muestra resulta una instalación de objetos de énfasis discursivo en los que se condensa un comentario crítico acerca del vasallaje social y cultural en torno a la mujer y al medioambiente”, expresa el curador.


El núcleo Semilla sagrada parte del contacto que Marisa Caichiolo estableció con mujeres de pueblos originarios, con quienes realizó un proyecto de video con cantos y rituales que propiciaran la reactivación de la tierra durante la pandemia a manera de sanación.


Ahora lo presenta en las salas del museo para continuar y generar una conexión con la abundancia y la Madre Tierra permitida a través de la colectividad y un proceso de afectividad.


Es así como la artista comparte sus vivencias e invita a los visitantes a involucrarse directamente para profundizar y, tal vez, identificarse de alguna forma con las situaciones mostradas en un ejercicio que permita la generación de un cambio.



Lugar de enunciación

Marisa Caichiolo


Abierta al público

Del 20 de octubre de 2023 al 21 de enero de 2024

Salas 2, 3 y 4. Planta baja


Obra participante

Arte objeto, fotografías, instalaciones y videos


Temporalidad

2011-2023



Fotos: Andrea Báez

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